6 beneficios de la miel para la salud Este elixir colabora en el tratamiento de quemaduras, tos, ansiedad y más.

Los beneficios de la miel se han pregonado desde la antigüedad, y resulta que los griegos y los romanos de esos tiempos habían dado con algo interesante: la miel realmente tiene propiedades terapéuticas para la salud.

Aunque la miel —sustancia dulce y viscosa que producen las abejas con el néctar de las flores— técnicamente es un azúcar, “también es sumamente rica en una variedad de compuestos bioactivos”, explica Joy Heimgartner, dietista certificada de Mayo Clinic (y entusiasta apicultora). Esos incluyen una gama de minerales, probióticos, enzimas, antioxidantes y otros fitoquímicos.

Existen cuatro tipos comunes de miel: la Junta Nacional de la Miel (National Honey Board) define la miel cruda o pura como la “miel tal como existe en el panal o la que se obtiene por extracción, decantación o filtrado sin añadir calor”. La miel de manuka, producida con las flores del arbusto de manuka, es conocida por sus singulares propiedades antibacterianas que se atribuyen a un compuesto llamado metilglioxal, señala Jordan Hill, dietista certificada principal de Top Nutrition Coaching.

La miel orgánica se produce sin sustancias químicas sintéticas, pesticidas ni organismos genéticamente modificados (OGM). Asimismo, se ha reportado que la miel producida localmente brinda alivio de las alergias estacionales al polen de la zona, aunque son limitadas las pruebas científicas respaldatorias, comenta Hill.

Según ella, la miel puede sustituir el azúcar en las recetas, pero ten presente que posee un sabor característico (que depende de las flores con las que se elaboró); es más dulce que el azúcar (la regla general es usar de ¾ a 1 taza de miel por cada taza de azúcar); es un líquido y puede que tengas que reducir la cantidad de los otros líquidos o aumentar levemente los ingredientes secos de la receta; y se dora más rápidamente que el azúcar (conviene reducir la temperatura del horno en 25 °F)

Cualquiera sea el uso que le des a la miel —en una receta o como condimento—, siempre recuerda que es un endulzante. “La miel es una solución azucarada supersaturada y deberíamos limitar los azúcares añadidos de todo tipo”, dice Heimgartner. De todos modos, “si estás buscando un endulzante con más propiedades, la miel es fantástica”. Aquí te mostramos seis de los motivos.

 

1. La miel no eleva el azúcar en la sangre tan rápido como el azúcar blanca

“La miel se metaboliza diferente del azúcar blanca y produce menos picos de azúcar”, explica la dietista certificada y nutricionista Dawn Jackson Blatner, autora de The Flexitarian Diet. “Las investigaciones sugieren que la miel puede incrementar la sensibilidad a la insulina y apoyar la función del páncreas, el órgano que produce insulina”. Una revisión de estudios preliminares del 2018 (en inglés) señala el “efecto hipoglucémico” de la miel y su uso como “agente antidiabético nuevo que podría adquirir gran importancia en el control de la diabetes y sus complicaciones”.

Y un estudio (en inglés)  del 2022 de la Universidad de Toronto halló que la miel mejora los valores importantes de la salud cardiometabólica, entre ellos el azúcar en la sangre, el colesterol y los niveles de triglicéridos, en especial si la miel es cruda y proviene de un solo origen.

2. La miel puede contribuir al tratamiento de heridas o quemaduras

“Durante siglos se utilizó la miel para curar heridas, y ciertos tipos de miel, como la miel de grado médico, han demostrado tener potencial para el control de heridas gracias a sus propiedades antimicrobianas y a su eficacia en promover la cicatrización”, dice Hill, quien de todos modos aconseja consultar a los profesionales médicos en cuanto al cuidado adecuado de las heridas. Heimgartner, especialista certificada
en nutrición oncológica, explica: “En realidad hay mucha evidencia de que el uso de la miel durante la radioterapia para el cáncer oral ayuda a prevenir algunos de los efectos secundarios más graves de la mucositis”, que es la inflamación de la mucosa bucal.

¿Qué efecto tiene? “Las investigaciones sugieren que la miel previene o controla el crecimiento de las bacterias en la herida, contribuye al desbridamiento de tejidos muertos y microorganismos, y transporta oxígeno y nutrientes a la herida para acelerar la cicatrización”, dice Blatner.

3. La miel es rica en polifenoles, incluidos los flavonoides

¿Por qué es importante? Porque esas dos sustancias tienen propiedades tanto antioxidantes como antiinflamatorias, lo cual significa que protegen al cuerpo contra el estrés oxidativo, que puede manifestarse como cáncer, enfermedades cardíacas u otras afecciones. Pero Hill advierte que los polifenoles en las mieles pueden variar considerablemente, dependiendo del tipo de miel y de su origen floral.

4. La miel puede ser un eficaz supresor de la tos

Un metaanálisis (en inglés) del 2020 halló que la miel es una opción muy disponible y económica a los antibióticos para controlar la frecuencia y gravedad de la tos, aunque concluyó que se necesitan más estudios. “Se cree que la textura espesa de la miel y sus posibles propiedades antioxidantes y antimicrobianas alivian los síntomas de la tos”, dice Hill, pero agrega la advertencia de que no debe darse miel a los bebés menores de 1 año por el riesgo de botulismo.

 

5. La miel puede brindar beneficios antidepresivos o ansiolíticos

 

“Las investigaciones sugieren que los compuestos de polifenoles de la miel, como apigenina, ácido cafeico, crisina, ácido elágico y quercetina, contribuyen a la salud del sistema nervioso, lo cual podría mejorar la memoria y el estado de ánimo”, explica Blatner. Aunque se necesitan más estudios, una revisión de investigaciones (en inglés) del 2014 indica que una propiedad nootrópica (o estimulante de la función cognitiva) establecida de la miel “es que asiste a la formación y desarrollo de todo el sistema nervioso central, en particular entre los recién nacidos y los niños de edad preescolar, lo cual conduce al mejoramiento de la memoria y el crecimiento, a la reducción de la ansiedad y a la optimización del rendimiento intelectual más adelante”.

 

6. La miel puede contribuir a la salud intestinal

Las investigaciones iniciales revelan que “la miel posee una capacidad sumamente especial de contribuir al microbioma sano del intestino porque contiene propiedades tanto probióticas (o bacterias beneficiosas) como prebióticas, que favorecen la proliferación de las bacterias beneficiosas”, señala Blatner, aunque las pruebas son limitadas. Un documento (en inglés) del 2022 patrocinado por el Instituto Nacional de Salud de Malasia concluyó que “debe darse mayor atención y llevarse a cabo investigaciones más detalladas sobre las abejas melíferas y la miel por su potencial de ser buenas fuentes de probióticos y prebióticos, para poder avanzar al próximo nivel”.